mientras duermen los muñecos hay caracoles que despiertan llenos de baba y en su juego interior zigzaguea siempre el peso de sus laberintos que yacen tirados en el suelo como circulares calcetines rayaditos.
Le pesan los ojos del rimel o la ternura. Siente el cosquilleo del aire atrapado entre la dúctil antena y su mejilla. Por primera vez es ella quien más se baba.
4 comentarios:
.
quiero una muñeca así
para sacarme fotos
con ella.
.
bésame como el peso y el paso de un caracol
mientras duermen los muñecos hay caracoles que despiertan llenos de baba y en su juego interior zigzaguea siempre el peso de sus laberintos que yacen tirados en el suelo como circulares calcetines rayaditos.
Le pesan los ojos del rimel o la ternura. Siente el cosquilleo del aire atrapado entre la dúctil antena y su mejilla. Por primera vez es ella quien más se baba.
Publicar un comentario