miércoles, 14 de octubre de 2009

Moda y Pueblo



Nunca entendí por qué en aquellas imágenes que nos volvieron niños, hubo fantasmas susurrándome al oído que el cielo es una migración de pájaros cuyas bandadas se vuelven violetas con nuestros aleteos.

1 comentario:

Felipe Smides dijo...

es tal vez en la tarde que el contraluz de las cortinas se inventa un aeropuerto.